Si bien su origen es incierto y muchas son las regiones españolas que dicen tener la auténtica receta (con distintas variantes todas ellas), todos los indicios indican que San Sebastián sea el punto de origen de éste exquisito dulce de elaboración casera, aunque es uno de los postres más tradicionales de todo Castilla y León.
Aunque, como hemos dicho, es un postre eminentemente casero, puede encontrarse en algunas pastelerías y eso si, suele ser uno de los postres que más se repiten en nuestros restaurantesdentro de la categoría : postres caseros.
La forma de elaboración se realiza siguiendo recetas tradicionales, con variantes por zonas, pasadas de generación en generación.
Suelen encontrarse con distintos formatos, aunque lo más extendido es en forma cuadrada o rectangular de unos 3-5cm y un espesor de 1-2cm.
Al estar rebozadas y fritas, su color es dorado, con una textura cremosa, pero con consistencia. Como presentación, su superficie suele estar espolvoreada con azúcar (normal o glass) y con canela.
Entre sus múltiples atractivos encontramos que es un postre dulce y sabroso, con un aporte calórico bastante bajo para su condición de “dulce”, ya que ronda las 200 kcal por cada porción de 100gr.Ingredientespara4-6personas.
- 6 Huevos
- 60 gr. de maicena
- 60 gr. de harina
- 120 gr. de azúcar
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 1/2 l. de leche
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 100 gr. de azúcar glasé (azúcar molida)
- 1 nuez de mantequilla
Elaboración:
Se pone la leche a hervir.
En otro cazo, se ponen los huevos batidos, el azúcar y la vainilla. Se agrega la harina y la maicena y se remueve todo muy bien.
A continuación, se le añade la leche hirviendo y, sin dejar de remover, se deja cocer unos cinco minutos.
La crema debe de quedar muy espesa, si no es así, se le añade más maicena diluida en leche y se le agrega poco a poco hasta alcanzar el espesor adecuado.
Se pasa la crema por un colador grande
para que no queden grumos, ya que quedarían muy desagradables al paladar.
Se unta una fuente de horno, ya que tiene rebordes y bastante base, con un poco de mantequilla y se vierte la mezcla, hasta que cuaje bien, se corta en porciones regulares y se desmolda.
Se pone una sarten al fuego con bastante aceite.
Las porciones se pasan por harina y huevo batido, se rebozan bien por ambas caras y se fríen en la sartén.
Cuando estén doradas, se sirven en una fuente espolvoreadas con azúcar glasé y canela.
De esta manera ya estarían listas, pero para los más “atrevidos” las aconsejo flambeadas con un buen licor, le dan un toque especial.
Otras formas de servir Leche Frita en algunos restaurantes de Madrid
- Se prepara con forma circular y acompañada de merengue y natillas de mango.
- Es una leche frita muy cremosa que se acompaña de ‘mousse’ de chocolate blanco
- Sirven la leche frita con canela en polvo y caramelo.
- Leche frita servida en taquitos y acompañada de una salsa de fresas, frambuesas y moras.
- Leche frita infusionada con anís y servida junto con crema de vainilla.
- Con chocolate caliente por debajo y canela por encima.
- Leche frita recién hecha, servida en porciones más finas de lo habitual con azúcar y canela.
- Leche frita acompañada de helado de vainilla y caramelo.
- Flambeada con anís y adornada con canela en polvo y azúcar moreno.