Podemos pensar que está de moda el empleo de aceites aromatizados o aceites hechos con otra materia que no sea la aceituna, pero volviendo la mirada al pasado, nos sorprende bastante encontrar en los clásicos recetas para la elaboración de aceites de este tipo.
He aquí unas recetas que nos ha transmitido Paladio, Tratado de Agricultura.
ACEITE DE MIRTO
Meter en una onza de hojas de mirto por cada libra de aceite, y, por cada diez onzas, una hemina de vino seco añejo y se pone a hervir con aceite. Las hojas se salpican con vino para evitar que se frían antes de cocer.
ACEITE DE BAYAS DE LAUREL
Poner a hervir en agua caliente la mayor cantidad posible de bayas de laurel que estén abultadas por la madurez y, así que hayan hervido durante mucho rato, se coge despacito, con plumas, la capa flotante del aceite que desprende y se envasa.
ACEITE DE LENTISCO
Se coge la mayor cantidad posible de granos maduros de lentisco y se deja que queden amontonados un día y una noche. Después se pone sobre una vasija cualquiera un cesto lleno de dichos granos y añadiendo agua caliente se estrujan y comprimen. Pero recuérdese que hay que echar de vez en cuando agua caliente para que no pueda cuajarse en frío.
ACEITE DE VIOLETAS
Echar tantas onzas de violetas como libras de aceite se hayan puesto y se deja a la intemperie durante cuarenta días.
ACEITE DE LIRIOS
Echar para cada libra de aceite diez lirios y en un utensilio de vidrio se dejará durante cuarenta días a la intemperie.
ACEITE DE ROSAS
En una libra de aceite se mete una onza de pétalos de rosa y durante siete días se deja al sol y al sereno.
ACEITE DE MANZANILLA
Por cada libra de aceite se echa una onza de centros amarillos de flor de manzanilla, quitándoles las hojas blancas de las que está rodeada la flor. Se pone al sol durante cuarenta días.
ACEITE SIMILAR AL DE LIBURNIA
Añadir al aceite virgen extra hojas de laurel y junco machacadas y tamizadas, sal tostada y molida. Se dejan un buen rato en el aceite y se mueve. Al cabo de tres días y medio, cuando asiente, servirá para el consumo.
PLANTEAMIENTO DEL TALLER DIDÁCTICO
La idea es que cada alumno escoja el aceite que más le agrade y que realice la receta en el aula.
El alumnado dispondrá de la receta clásica, deberá investigar las equivalencias de las medidas romanas con las nuestras, podrán realizar cualquier adaptación de las recetas clásicas si lo considera pertinente, pero deberá justificar sus cambios. A su vez, cada estudiante aportará los materiales necesarios.
Meter en una onza de hojas de mirto por cada libra de aceite, y, por cada diez onzas, una hemina de vino seco añejo y se pone a hervir con aceite. Las hojas se salpican con vino para evitar que se frían antes de cocer.
ACEITE DE BAYAS DE LAUREL
Poner a hervir en agua caliente la mayor cantidad posible de bayas de laurel que estén abultadas por la madurez y, así que hayan hervido durante mucho rato, se coge despacito, con plumas, la capa flotante del aceite que desprende y se envasa.
ACEITE DE LENTISCO
Se coge la mayor cantidad posible de granos maduros de lentisco y se deja que queden amontonados un día y una noche. Después se pone sobre una vasija cualquiera un cesto lleno de dichos granos y añadiendo agua caliente se estrujan y comprimen. Pero recuérdese que hay que echar de vez en cuando agua caliente para que no pueda cuajarse en frío.
ACEITE DE VIOLETAS
Echar tantas onzas de violetas como libras de aceite se hayan puesto y se deja a la intemperie durante cuarenta días.
ACEITE DE LIRIOS
Echar para cada libra de aceite diez lirios y en un utensilio de vidrio se dejará durante cuarenta días a la intemperie.
ACEITE DE ROSAS
En una libra de aceite se mete una onza de pétalos de rosa y durante siete días se deja al sol y al sereno.
ACEITE DE MANZANILLA
Por cada libra de aceite se echa una onza de centros amarillos de flor de manzanilla, quitándoles las hojas blancas de las que está rodeada la flor. Se pone al sol durante cuarenta días.
ACEITE SIMILAR AL DE LIBURNIA
Añadir al aceite virgen extra hojas de laurel y junco machacadas y tamizadas, sal tostada y molida. Se dejan un buen rato en el aceite y se mueve. Al cabo de tres días y medio, cuando asiente, servirá para el consumo.
PLANTEAMIENTO DEL TALLER DIDÁCTICO
La idea es que cada alumno escoja el aceite que más le agrade y que realice la receta en el aula.
El alumnado dispondrá de la receta clásica, deberá investigar las equivalencias de las medidas romanas con las nuestras, podrán realizar cualquier adaptación de las recetas clásicas si lo considera pertinente, pero deberá justificar sus cambios. A su vez, cada estudiante aportará los materiales necesarios.
En nuestro caso hemos realizado un aceite aromático de laurel adaptando la receta.
MATERIALES NECESARIOS
- Una botella de aceite virgen extra que podrán compartir varios alumnos.
- Las hierbas o flores naturales que necesite la receta escogida. Se podrán sustituir por otras en el caso de no encontrar alguna de ellas. Otros ejemplos serían aceite de albahaca, hierbabuena, clavo, de ajos, etc.
- Botellas de cristal con tapón de corcho, tamaño mediano.
- Cartulinas marmoladas para hacer las etiquetas y pegar o colgar en la botella.
- Esas mismas cartulinas servirán para hacer un pequeño texto con la receta que se plegar a modo de volumen romano y se colgará en el cuello de la botella con un cordón de símil de cuero. Ver ejemplo:
Desde De Re coquinaria os animamos a realizar esta actividad.
Estos aceites además de tener un uso culinario podrían usarse para masajes corporales e hidratantes.
No comments:
Post a Comment